Maite Oiartzun Misionera de Ntra. Sra. de Africa nos habla desde Burundi.
Desde la comunidad de las Misioneras de Nuestra Señora de África en Burundi os comparto que hace 6 años iniciamos el proyecto de plantar la Artemisia, planta medicinal para prevenir y curar la malaria, enfermedad que sigue causando tantas muertes en África.
Es una misión apasionante, trabajo en equipo con el P. Bernard Lesay, misionero de África- Padre Blanco, los agrónomos y los agricultores/as de Gitega. También colaboro en red con la Casa de la Artemisia www.maison-artemisia.org que promueve los talleres de sensibilización en 28 países de África.
En la ciudad de Gitega donde vivimos, realizamos este proyecto en la Escuela Social, en la Escuela de Arte y en el Instituto Christ Roi donde enseño la Catequesis.
Son centros educativos que acogen a los alumnos/as que vienen de diferentes regiones de Burundi. Los alumnos viven en los internados, para favorecer que tengan las condiciones necesarias para estudiar.
Los directores han puesto a nuestra disposición unos terrenos para poder cultivar y toda la comunidad educativa participa. Cada año escolar plantamos con los profesores y alumnos/as las plantas de Artemisia que los agricultores preparan.
Es una experiencia formidable y dinamizante el hecho de cultivar juntos la tierra. En 4 meses recogemos mucha Artemisia para todo el año. Los profesores y alumnos beben la tisana de Artemisia 3 veces por semana para fortificar el sistema inmunitario y prevenir la malaria.
Hemos constatado positivamente que los alumnos/as han mejorado su salud y también los resultados académicos.
Otro objetivo es que los alumnos/as aprendan en la escuela a cultivar y conozcan los beneficios de la Artemisia, y en las vacaciones de Navidad y la Semana Santa llevan las semillas a las diferentes regiones de Burundi.
De esta manera, los alumnos/as son los promotores y promotoras de la Artemisia en sus familias y parroquias.